Para indicar que no se ha realizado algo, no es adecuado emplear dejar de con verbos que expresan acciones puntuales, como en dejar de pitar un penalti.
Sin embargo, y sobre todo en noticias del mundo del deporte, es posible encontrar frases como las siguientes: «Martínez dejó de pitar un claro penalti sobre el futbolista», «Ese colegiado fue el triste protagonista cuando dejó de señalar un penalti escandaloso» o «Dejó de pitar un penalti clarísimo sobre Ramírez».
Tal y como señala la Nueva gramática de la lengua española, dejar de + infinitivo significa ‘cesar, interrumpir una situación’, como en «Los que dejaron de fumar antes de los 45 años redujeron el riesgo de muerte notablemente». En esta oración se habla de aquellos que han abandonado la acción de fumar, que ya no fuman.
Este uso es inadecuado en los ejemplos iniciales porque los verbos empleados expresan en estos casos una acción puntual, y no continua. Dado que dejar de + infinitivo tiene el significado de ‘interrumpir una acción’, no se puede entender que se interrumpa el transcurso de la acción de pitar y de señalar, pero sí el de fumar o correr, por ejemplo. Así, Dejó de caminar por la playa es adecuado porque caminar por la playa es una actividad que tiene duración (y, por tanto, se puede interrumpir), mientras que Dejó de alcanzar la meta no lo es porque alcanzar la meta designa algo puntual.
Por ello, y puesto que tan solo se quiere aludir a que una acción puntual no se ha realizado, lo conveniente es eliminar dejar de y negar el otro verbo, o acompañarlo también de expresiones como deliberadamente, a propósito, etc., si lo que se quiere es enfatizar que tal omisión se lleva a cabo de forma intencionada.
Así pues, en los ejemplos imprecisos habría sido preferible escribir «Martínez no pitó un claro penalti sobre el futbolista», «Ese colegiado fue el triste protagonista cuando no señaló deliberadamente un penalti escandaloso» y «No pitó a propósito un penalti clarísimo sobre Ramírez».